Desde que el hombre caminó por primera vez en la tierra, hemos estado golpeando objetos inanimados y notando armonías tonales en todo lo que hacemos. La música evoca una emoción tan profundamente arraigada en nosotros, que nos conecta con nuestro ser interior en un número infinito de niveles.
Tuve suerte, supongo, creciendo, estaba al tanto de los gustos de mis padres, de la generación de 60, todas esas cosas hippies, junto a una fina selección de blues, reggae, jazz y canciones que se han perdido en nuestra generación moderna. De hecho, mi padre tenia uno de los primeros ejemplares de los primeros 45 de una etiqueta denominada Chess. Vale una fortuna ahora, sin duda. La música siempre ha sido una parte importante en mi vida.
Entonces ¿por qué la música nos llega a este nivel más básico? ¿Qué tiene el ser humano que nos hace anhelar este “alimento del alma”? Bueno, la música es un medio de comunicación multifacético. A través de la música es posible crear todas las características acústicas que usamos en nuestro lenguaje cotidiano. Además, estas características acústicas se pueden generar de una forma muy definida. Esto le permite a los compositores llegar a nosotros en nuestro estado más primitivo, simplemente
El desarrollo de un entendimiento sólido de la teoría musical del piano es algo que lo ubicará por sobre el resto a medida que va aprendiendo a tocarlo. Aquellos músicos capaces de reconocer patrones de acordes, valores musicales, estructuras rítmicas y escalas son inmediatamente más exitosos a la hora de aprender una nueva música y tocarla. Esto se debe a que la teoría es la columna vertebral de toda música, y poder comprender estos conceptos básicos es vital para el aprendizaje y el dominio de los diferentes estilos de interpretación.
Aprender piano mientras toma clases de teoría musical es una buena forma de incorporar la teoría mientras aprende nuevas canciones. De esta manera, se puede enfocar en acordes particulares, notas y escalas que puede aplicar en canciones particulares. Entender los mecanismos de cada pieza musical que usted interpreta se hará más fácil a medida que practique y aprenda. Luego podrá evaluar cada canción o pieza musical antes incluso de intentar tocarla, porque estará capacitado para entender las notas y los ritmos de la composición.
Solo necesita unas pocas lecciones de teoría musical, y ya estará en camino a experimentar una diferencia en la manera de aprender y de tocar el piano. Puede ser que también se encuentre más confiado a la hora de confrontar nuevos estilos de interpretación o de tocar piezas más difíciles una vez que haya dominado los conceptos básicos de la teoría. Sobre todo, asegúrese de ir a su propio ritmo cuando tome cursos online. Recién después de haber dominado un concepto de la teoría musical, pase al siguiente. La teoría musical del piano es esencial para su crecimiento como músico, y lo ayudará a tocar satisfactoriamente cualquier melodía que se le cruce por el camino.
Solemos asociar ciertas canciones y ciertas músicas con eventos de nuestras vidas. Algunas canciones nos representan recuerdos especiales. Sin duda recordamos la canción que estaba sonando cuando fuimos a nuestro primer baile, la canción que la banda intentaba tocar en los entretiempos de los partidos de fútbol en el colegio secundario, las canciones que escuchamos en la primer cita, y las canciones que escuchábamos por la radio mientras manejábamos el primer auto. La música de los 70s quizás sea el estilo más reconocible de cualquier época. Los artistas de aquella época nos proveyeron con numerosas canciones que amamos cantar y bailar. En aquella era, la mayoría de las bandas tocaban sus propios instrumentos sin necesidad de secuenciar partes de las composiciones.
La nostalgia de la música de 1970 vive en la actualidad. Podemos escucharla en las estaciones de radio específicas, en CDs, en mp3, podemos descargarla en nuestra computadora y luego copiarla. Para aquellos de nosotros que preferimos los discos, aún se pueden comprar en las disquerías, tiendas de antigüedades o de segunda mano, o incluso en ferias americanas. Seguramente varios de nosotros poseamos nuestra propia colección de discos y una bandeja para escucharlos cada vez que tengamos que liberar esos días nostálgicos de los 70s. Algunas de aquellas bandas siguen tocando incluso después de 30 años. ¡No existe nada igual a ver a nuestros artistas favoritos de los 70s tocando en vivo! La música de 1970 sigue siendo popular, para las personas de todas las edades- no solamente para aquellos que crecieron con ella. Nunca envejece. Solo mejora con cada década que pasa.
Los fanáticos de los Beatles ahora pueden tocar los pianos de Abbey Road en su propio comedor. Los ingenieros han tomado los instrumentos originales, las mezclas y los micrófonos utilizados por la banda y han creado un programa para su computadora. La réplica del estudio dos de Abbey Road permite a los fanáticos hacer su música de la misma manera que se hacía en los 60. Se han usado docenas de micrófonos para grabar distintas versiones de cada nota de un rango de instrumentos utilizados por los Beatles. Así se ha creado una “librería” de sonidos que pueden ser tocados con la ayuda de un programa de computadora.
Los usuarios pueden tocar estos instrumentos enchufando un teclado a su computadora, y disparando una muestra de la librería desde cada tecla. Hasta pueden controlar la mesa de mezcla original y demás equipo técnico utilizado por los ingenieros del estudio original. “Para conseguir un sonido correcto se ha llevado a cabo bastante investigación, y hasta hemos hablado con los ingenieros originales para que nos den consejos”, dijo Timothy Self de Propellerheads, la compañía detrás del programa.
Entre los instrumentos incluidos se encuentran el Mellotron, una versión en cinta del sampler utilizado en Strawberry Fields Forever, y las campanas tubulares utilizadas en When I'm 64. La más famosa, sin embargo, es el piano “Mrs Mills” utilizado en Lady Madonna. El piano, construido en 1905, obtuvo su nombre al ser usado en docenas de grabaciones con la artista de los años 60, Mrs. Mills, quien compartía su estudio con los Beatles.
El sonido único de este piano se ha logrado a través de dos procedimientos. Primero, por pedido del ingeniero pop de Abbey Road, Stuart Etham; un técnico de Steinway ha tratado los martillos del instrumento con laca, dándole un sonido más suave y percusivo. Segundo, se ha desafinado deliberadamente “como un piano de un bar, sólo que mejor”. “Aquí se encuentran algunos de los instrumentos más famosos del mundo, y ha sido maravilloso trabajar con ellos”, dijo el señor Self. “Tienen una verdadera alma que esperamos poder capturar”. “Sin embargo, tuvimos que tener mucho cuidado. Cuando llegamos pedimos afinar de vuelta el piano de Mrs. Mills, y nos dijeron que no se podía porque se suponía que tenía que sonar de esa manera”.
Hasta ahora, el programa sólo había estado disponible para los músicos profesionales. Sin embargo, esta semana la compañía Propellerheads empezará a venderlo en una versión casera a 180 libras esterlinas. Los Beatles grabaron 90% de sus discos y simples en Abbey Road desde 1962 hasta 1970. Entre ellos se incluyen Revolver, Help y Abbey Road.
Henry Z. Steinway, el ultimo bisnieto sobreviviente del inmigrante alemán que fundó la fábrica de pianos Steinway & Sons en Estados Unidos en 1853, fue el último familiar que controló la empresa. Las ventas decrecientes y las desavenencias familiares lo empujaron a vender la empresa a la gigante corporación CBS en 1972, pero sigue siendo asesor y embajador para la firma Steinway. Hasta poco después de morir a la edad de 93 años en Manhattan, a unas pocas cuadras de donde nació, Steinway asistía a conciertos y convenciones de música, visitaba a los revendedores, firmaba los pianos nuevos y daba conferencias sobre la historia de su familia y del piano en general. Sin embargo, a pesar de las innumerables lecciones de piano de su infancia, siempre tuvo problemas para decir la diferencia entre “Este es Beethoven o aquél es Beethoven“.
Henry Ziegler Steinway nació el 23 de Agosto de 1915 en el departamento de sus padres en la Avenida 375 Park, Manhattan, en el mismo edificio –ya demolido y sustituido por el rascacielos Seagram– en donde su bisabuelo construyó algunos de los primeros pianos en América en el año 1850. Este último, Heinrich Engelhard Steinweg, fue un creador analfabeto de gabinetes que trabajó a los 18 años en la armada del Duque de Prusia contra el ejército de Napoleón en Waterloo antes de construir dulcimers, luego pianos en su cocina en Seesen, Sajonia Baja. Huyendo de la agitación política en su casa, emigró a los Estados Unidos en el año 1850 a los 53 años, cambió su nombre a Henry Steinway y fundó Steinway & Sons en 1853, patentando todos los descubrimientos como el “sobre-tensado” y las arpas de una sola pieza de hierro fundido.
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Mahler fue el segundo de catorce hermanos, de los cuales seis fallecieron durante la infancia. Su padre, Bernhard, era propietario de una taberna y su madre, Marie, era hija de un fabricante de jabones. Poco tiempo después de que Mahler naciera, él y sus padres se mudaron a Iglau, Moravia. Su padre fue capaz de abrir una exitosa taberna y una fábrica de cervezas, lo cual le permitió respaldar las ambiciones musicales de Mahler.
Niñez:
Mahler vivía cerca de la plaza del pueblo en donde se celebraban conciertos muy frecuentemente por la banda militar, esta fue la razón por la cual desarrolló el gusto por la música desde una edad muy temprana. Fue discípulo de Anton Bruckner. Aprendió varias canciones en pentagramas de aquellos amigos que asistían a escuelas católicas y recibió lecciones de música por parte de músicos locales. No pasó mucho tiempo después de que su padre le compró un piano en que Mahler se volvió un intérprete muy hábil.
Primeros años de adultez:
A los 21 años, Mahler recibió la dirección de un trabajo en el teatro Landes de Liabach. Allí dirigió más de 50 piezas, incluyendo su primera ópera, la cual resultó ser nada más ni nada menos que “Il Trovatore”. En el año 1883, Mahler se mudó a Kassel, firmó un contrato, y trabajó por varios años como “RDirector coral y musical”. Este podrá haber sido un título de fantasía, pero aún tenía que reportarlo al Kapellmeister residente. De 1885 a 1891, Mahler trabajó en Liepzig, Praga y Budapest.
Adultez tardía:
Mahler se mudó a Viena y se convirtió en el Kapellmeister de la aclamada Filarmónica de Viena. Varios meses después fue promovido a director. Como nuevo director del teatro Hofoper, sus osadas, provocativas, y controversiales presentaciones atrajeron a gran número de personas al teatro y muchas reseñas por parte de la prensa. En 1907 y 1910, Mahler condujo la Filarmónica y la Orquesta Sinfónica de Nueva York. Un año después, luego de regresar a Viena, falleció de una endocarditis bacterial.
¿Pero, por qué tanto alboroto por una onda sonora cuya frecuencia, además, resulta tan difícil de contar y de percibir para la gente no especializada? Después de todo, un piano puede ser afinado considerablemente por encima o por debajo del La 440, proporcionando notas que están todas en correcta proporción las unas con las otras. Y el porcentaje de personas, incluso músicos, quienes poseen ese místico regalo del “tono perfecto” y que pueden decir si realmente el La está a 440, es muy, muy bajo. Entonces, ¿por qué tanto interés por este tema? Aquí te presentamos numerosas respuestas que la mayoría de los buenos músicos deberían transmitir:
Segundo, se ha aceptado internacionalmente al La 440 como el tono patrón estándar de afinación de todos los intrumentos musicales. De este modo, toda la música que se oye en radio, TV, y grabaciones y videos musicales, al igual que el tono estándar utilizado en los instrumentos electrónicos, están afinados según el La 440. Entonces como dice la famosa frase: si no puedes contra ellos, úneteles.
Tercero, siempre que se esta llevando a cabo cualquier seria instrucción o estudio de piano, el tono estándar o patrón es extremadamente importante para un apropiado entrenamiento auditivo. Eso resulta crucial con los niños, cuyos dones naturales pueden ir más allá de lo que el niño puede interpretar en realidad. De este modo se podrá percibir, en caso de poseerlo, si el niño ha sido consagrado con el don del “tono perfecto” u “oído absoluto“, lo cual no es más que una memoria tonal extraordinaria. Y por otro lado, muchos niños se sienten sumamente confundidos, y se distraen con mayor facilidad cuando un piano se encuentra afinado por debajo del tono estándar. ¡Enfrentémoslo, un piano afinado según un tono que no sea el La 440 simplemente no se encuentra afinado!
Cuarto, no ocuparse de que la afinación del piano permanezca según el La 440 es riesgoso para su instrumento. Ello podría acabar en serios problemas, especialmente cuando el dueño intenta que el piano vuelva a ser afinado nuevamente en el tono correcto. Estos problemas incluyen: ruptura de cuerdas (aunque sean una o dos, resultan bastante costosas a la hora de reemplazarlas); grietas en la caja armónica, puentes o incluso en el arpa de metal debido a los cambios de tensión de las cuerdas; y el altísimo costo de las múltiples afinaciones frecuentes necesarias para lograr que el piano vuelva a establecer su tono.
Conclusión: Si su piano no está en 440, llame al afinador de pianos para que lo afine y lo ponga en tono.
¿Es este el último trabajo para piano de Beethoven? El musicólogo Peter McCallum de Sydney cree que lo es. Las 32 barras de la notación musical escrita le llamaron la atención cuando estaba estudiando el último libro de ensayos del compositor en Berlín, hace algunos años. Requirió un poco de trabajo de detective determinar qué fue lo que intentó decir el gran compositor, cuya escritura era caótica.
“Beethoven siempre tenía ideas y era compulsivo”, dijo. “La cantidad de papel que utilizó en los últimos 3 años de su vida es sorprendente. Hay un montón de pequeñas ideas que no llevan a ningún lado. Pero esto era más que una pequeña idea. Tiene una parte derecha y una parte izquierda y marcas de frases en algunos lados. Por lo tanto, es claro que es una pieza completa.”
La pianista Stephanie McCallum utilizó la transcripción de su marido para hacer la primera grabación de la pieza. La Bagatella en Fa menor dura 54 segundos y es la pieza final de su CD Para Elisa, Bagatelles para Piano por Ludwig Van Beethoven. Aunque la mayoría de los libros de ensayos de Beethoven fueron estudiados en detalle, el último libro -alojado en la librería estatal de Berlín- atrajo muy poco la atención.
A pesar de que sus últimos trabajos a veces son vistos como espirituales, este fragmento tiene una calidad diferente, dice Peter McCallum. “Es un poco melancólico. Pero es una cosa placentera y es fácil de tocar. Lo que me gusta de ella es que un chico puede disfrutar tocándola. Podríamos darle a Fur Elise un descanso por un tiempo.”
Henry Steinway, el último integrante de la famosa familia que fundara la prestigiosa fábrica de pianos Steinway & Sons, acaba de fallecer a los 93 años. Si bien la empresa ya no era de la familia, dado que fue vendida a CBS en 1972 y luego pasó a manos de otras empresas, Henry seguía participando de las actividades del fabricante como personal contradado.
Ya habíamos hablado de este video pero lo volvemos a poner pues es muy interesante.
Ludwig Van Beethoven (1770-1827) ocupa un lugar especial en la historia de la música. Sólo Bach o Mozart podrían ser comparados con su popularidad hoy en día. Su música es ampliamente conocida, incluso por aquellos que no son considerados aficionados a la música clásica. Recordemos que hace poco hablamos de las variaciones Diabelli. Uno de sus trabajos más grandes y más conocido es su Novena Sinfonía, comparable a la sinfonía Eroica, que contiene su melodía popular conocida como “Oda a la alegría”. Este impresionante trabajo marca el final de la escritura sinfónica de Beethoven; ¿o no? ¿Escribió Beethoven en verdad diez sinfonías?
Beethoven fue conocido por su propensión de pasar por muchos borradores antes de producir un producto final. Una mirada a cualquiera de sus partituras originales nos mostrará numerosas notas tachadas y melodías re-escritas. Como resultado, existen muchos bocetos desde que murió en marzo de 1827, pero muy pocos de ellos fueron etiquetados, y ¿como podría uno encontrar una sinfonía que supuestamente no existe?
El Dr. Barry Cooper, un musicólogo y estudiante de Beethoven, se decidió a principios de 1980 para encontrar algunas pruebas de este trabajo sin precedentes. “Yo no estaba buscando un Décima Sinfonía. Yo estaba buscando una”, dijo. Leyendo una descripción del trabajo de Karl Holz, un amigo de Beethoven que había escuchado los inicios del trabajo tocado en el piano por el propio Beethoven, conocía el trabajo iniciado con una introducción en la clave Mi bemol y seguida por un Allegro en Do menor. Fiel a la descripción, Cooper encontró bocetos que coincidían con la misma!
Aunque se había hecho un descubrimiento emocionante, era sin dudas el descubrimiento de una obra incompleta. Sólo alrededor de 250 compaces para un primer movimiento podrían ser unidos entre sí, y sólo existieron ideas de lo que habría sido el resto de la obra. Además, no se pude establecer un orden claro, y trabajar con fragmentos de armonías es difícil. Aún así, el doctor Cooper unió los fragmentos disponibles para formar un primer movimiento. Usando a las técnicas de componer normales Beethoven, logró completar la sección inicial de la Décima Sinfonía. “El objetivo… era acercarse lo más posible a lo que el compositor pretendía, sin dejar de ser consciente de que el éxito completo fue inalcanzable”.
Esta fascinante pieza musical fue estrenada en 1988 por la “Royal Philharmonic Society”, el grupo al que Beethoven le había ofrecido su Décima Sinfonía sólo días antes de su muerte! Como era de esperar, los críticos se mostraron escépticos y la actuación en si misma recibió mucha exageración de los medios. Aún así, el doctor Cooper consideró a la actuación un éxito. Una grabación de la pieza está disponible en los clásicos IMP (PCD 911) con Wyn Morris conduciendo a los miembros de la “Orquesta sinfónica de Londres”.
¿Qué es la música medieval?
La música medieval se caracteriza por el uso significante del canto. Más tarde fue armonizada con cuartas, quintas y octavas. Muchos estilos de música tomaron forma durante el Periodo Medieval: El canto gregoriano, los motetes, los dramas liturgicos y las “chansons”.
Manuscritos de la música medieval
Debido a que el costo de impresión, que significaba escribir a mano y copiar cada pieza de música para cada miembro, era muy alto, sólo las instituciones más ricas (iglesias y monasterios) fueron capaces de crear y duplicar manuscritos, para las cuales eso era un ícono. La música popular en ese momento no estaba impresa, y, por lo tanto, su estilo es relativamente desconocido. Ya que la notación de la música que hoy conocemos todavía no estaba inventada, la interpretación musical pudo variar drásticamente entre quienes creaban e interpretaban la música. Muchos de los instrumentos utilizados durante el Periodo Medieval todavía existen en la actualidad. Entre ellos el pan-flauta, la corneta medieval (un antecesor de la trompeta), el grabador, el laúd, la mandolina y por último, pero no menos importante, el dulcimer.